Habíamos mencionado en la reunión anterior, esta división del texto
freudiano que nos proponía Lacan en su seminario del año 1964, nos
referíamos a: de un lado la pulsión del otro el amor.29 Es
claro que, como dice Freud, el amor y el odio tienen la circunstancia
de ser refractarios a ordenarse dentro de la exposición de las
pulsiones, sin embargo debemos poder explorar las articulaciones
posibles en los conceptos, reconociendo de inicio que el amar no puede
ser concebido como una pulsión parcial. Por el contrario lo que el
texto vienen a decirnos es que el amar es una aspiración a lo total, no
a lo parcial, y por otro lado, desde el narcisismo, sabemos que el amor
padece de la ilusión de totalidad. Freud lo dice así.